¿Quiénes eran los cuatro del jeep? ¿Desde cuándo tienen las zonas en Viena? ¿Cómo se repartieron los distritos vieneses? ¿Qué pasó en el centro de Viena?
El 1 de septiembre de 1945 llegó el momento. Las tropas de las cuatro potencias ocupantes bajo sus altos comisarios Clark (EEUU), Koniev (URSS), Mc Creery (Gran Bretaña) y Béthouart (Francia) se hicieron cargo de sus zonas en Viena.
El sector americano comprendía los distritos, 7, 8, 9, 17, 18, 19. Los británicos tenían los distritos 3, 5, 11 (excluyendo Albern) 12, 13. El sector francés consistía en los distritos 6, 14, 15 y 16. Las tropas soviéticas ocupaban los distritos 2 (con Albern), 4, 10, 20, 21 y 22.
La Ciudad Interior fue administrada conjuntamente por las cuatro potencias ocupantes y también se denominó zona interaliada. La sede del mando interaliado era el Palacio de Justicia. La presidencia se rotó mensualmente.
La idea básica de la administración cuatripartita era que todas las oficinas gubernamentales y administrativas importantes estuvieran ubicadas en la Ciudad Interior. Si este distrito hubiera sido controlado sólo por uno de los cuatro aliados, éste podría haber ejercido presión sobre las autoridades austriacas, así como sobre el gobierno.
El «Four in a Jeep», como se llamaba la patrulla internacional, estaba formado inicialmente por tres soldados y comenzó su servicio el 5 de agosto de 1945. En septiembre de 1945, el francés se unió a ellos como cuarto hombre. Esto garantizó el orden y la seguridad de la población civil y de los miembros del ejército aliado.
Dado que los vehículos fueron proporcionados básicamente por el ejército estadounidense, los estadounidenses eran también los conductores. También se hizo una película suiza sobre los Cuatro en un Jeep en los años 50. La existencia de la Patrulla Internacional terminó el 14 de septiembre de 1955.
No sólo los problemas administrativos, sino también los económicos y humanos de la ocupación preocuparon a los vieneses. Los costes de ocupación ascendían inicialmente al 35% del presupuesto del Estado.
A pesar de las muchas cargas, se abrió un nuevo mundo: los estadounidenses llevaron a Viena paquetes de asistencia, cigarrillos y chicles. Los británicos aportaron la alta cultura: el «British Council» y Henry Moore, y los franceses el arte y la moda.